Rigetti, una empresa de computación cuántica, ha despedido al 28% de su personal y ha cambiado su hoja de ruta de productos. La compañía sigue en camino de lanzar un sistema de 84 qubits este trimestre, pero no se sabe cuándo lanzará su sistema de 336 qubits que estaba previsto para este año.

La empresa de computación cuántica Rigetti ha sufrido un duro golpe, despidiendo al 28% de su personal el lunes pasado. La compañía también ha adoptado una hoja de ruta de productos más conservadora, pero sigue en camino de lanzar un sistema de 84 qubits en este trimestre. La hoja de ruta actualizada ya no incluye una fecha de lanzamiento para un sistema de 336 qubits, que anteriormente se proyectaba para finales de este año. Rigetti despidió a 50 empleados y también está implementando un plan de negocios revisado y una nueva hoja de ruta tecnológica, según informó la compañía en una presentación ante la Comisión de Valores y Bolsa de EE. UU. la semana pasada. Esta medida de reducción de costos se produce mientras la compañía enfrenta la deslistación en la bolsa de valores Nasdaq. El nuevo enfoque de la hoja de ruta tecnológica se centra en un nuevo producto llamado Ankaa. Rigetti espera lanzar un sistema de 84 qubits llamado Ankaa-1 en el primer trimestre de este año, que mejora el actual sistema de 80 qubits llamado Aspen-M. Después de eso, Rigetti volverá a centrarse en la "fidelidad de puerta de 2 qubits al 99% en el anticipado sistema de 84 qubits Ankaa-2, y si se logra este objetivo, Rigetti planea cambiar su enfoque para escalar y desarrollar el anticipado sistema de 336 qubits Lyra", según dijo la compañía en un comunicado la semana pasada. La nueva hoja de ruta no proporciona una fecha de lanzamiento específica para el sistema de 336 qubits, que la compañía dijo en mayo pasado que se esperaba lanzar este año. La falta de implementaciones comerciales de computación cuántica podría ser un problema para los capitalistas de riesgo, quienes están impulsando más dinero hacia las empresas de IA generativa. Las compañías de computación cuántica requieren una infusión continua de efectivo para financiar el desarrollo del hardware, y las malas proyecciones económicas para 2023 podrían aumentar la presión sobre otras compañías de computación cuántica para mantener la liquidez mediante la reducción de costos y la preservación del efectivo en mano.