La inteligencia artificial (IA) y la computación cuántica tienen el potencial de transformar la industria del petróleo y gas, optimizando la producción, reduciendo costos y mejorando la eficiencia en todo el sector.

El petróleo y el gas natural siguen siendo dos de las materias primas más valiosas en el sector energético. Nunca ha habido un mayor énfasis en la eficiencia, minimizar el tiempo de inactividad y reducir el impacto ambiental al mismo tiempo que se cumplen los objetivos económicos. Desde un pozo de petróleo hasta una plataforma en alta mar o una refinería, cumplir con los objetivos en términos de seguridad, costos, carbono y producción requiere una estrategia bien definida. La inteligencia artificial (IA) puede ayudar a satisfacer estas necesidades y ahorrar miles de millones de dólares en gastos de capital y operativos. Con la integración de una estrategia de datos y soluciones de IA, las empresas de petróleo y gas pueden obtener información vital para mejorar los resultados comerciales en sus procesos aguas arriba. Algunos ejemplos de aplicaciones de IA en la industria del petróleo y gas incluyen: optimizar la producción con visión por computadora para analizar datos sísmicos y subsuperficiales más rápido, minimizar el tiempo de inactividad para el mantenimiento predictivo en equipos, analizar reservorios y acelerar la toma de decisiones operativas, modelar para predecir riesgos de corrosión del petróleo y reducir los costos de mantenimiento, digitalizar registros y automatizar la evaluación de datos geológicos adquiridos y gráficos, mejorando así la eficiencia de los activos de petróleo y gas, ahorrando cientos de miles de dólares en inventario y ajustando las cadenas de suministro. La inteligencia artificial en acción: según un informe de investigación de mercado de Mordor Intelligence, la inteligencia artificial global en el mercado de petróleo y gas natural valía $2.03 mil millones en 2021, y se prevé que crezca a $3.67 mil millones para 2027, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 10.81% durante el período de pronóstico (2022-2027). Empresas como BP y Royal Dutch Shell, que se han comprometido a lograr cero emisiones netas de carbono para 2050, están bajo una creciente presión para reducir su huella de carbono y cumplir con el Acuerdo de París sobre el cambio climático. Shell está utilizando IA para realizar mantenimiento predictivo en piezas individuales de equipos y sistemas completos para reducir su huella de carbono. Esto permite a las empresas anticipar y abordar posibles fallas en los equipos antes de que ocurran. En resumen, la inteligencia artificial y la computación cuántica tienen el potencial de transformar la industria del petróleo y gas en todo el mundo, proporcionando soluciones innovadoras para optimizar la producción, reducir costos y mejorar la eficiencia en todo el sector. Es fundamental que las empresas de petróleo y gas adopten estas tecnologías emergentes para mantenerse a la vanguardia en la industria energética.